martes, 7 de mayo de 2013

Cuando yo soñaba un mundo al revés (Publicado en Escuela 9.05.2013)


CUANDO YO SOÑABA UN MUNDO AL REVÉS

Había una vez un ministro de educación en España que, nada más tomar posesión de su cargo, lo primero que hizo fue convocar a todos los sectores de la comunidad educativa y a todas las organizaciones políticas y sociales para emplazarles a hacer un diagnóstico compartido de los principales problemas de la educación.

Analizaron en común los avances registrados en las últimas décadas y compartieron que la celeridad con la que se están produciendo los cambios sociales, el constante cambio en el mercado del trabajo y en las profesiones hacía necesario que en un momento como el actual se tenían que redoblar los esfuerzos en conseguir que ninguna persona quedara marginada del proceso educativo, que ningún joven abandonara prematuramente sus estudios pues correría grave riesgo de exclusión social.

A partir de ese análisis compartido repasaron la situación de las distintas etapas educativas. Se congratularon del importante avance que ha supuesto la generalización de la escolarización de todos los niños y niñas de 3 a 6 años y del notable incremento de la oferta de 0 a 3 años gracias al esfuerzo compartido entre el Ministerio de Educación y las Comunidades Autónomas para el desarrollo del Plan Educa3. Convinieron que había que seguir invirtiendo en esta etapa educativa, ya que, entre otras cosas, una buena oferta de escolarización temprana es un instrumento fundamental para compensar las desigualdades de origen.

Al analizar la situación de la Educación Primaria, comprobaron que la inmensa mayoría del alumnado que finaliza bien la Primaria no tiene ningún problema en Secundaria. Por ello, acordaron que para incrementar las tasas de éxito escolar había que centrarse mucho más en lo que se hace o se deja de hacer en la Educación Primaria, fundamentalmente en los primeros cursos, para conseguir intervenir a tiempo de superar las dificultades de aprendizaje en los procesos básicos de la lectura, la escritura o el cálculo. Con ese fin, acordaron incrementar el número de profesores en el segundo ciclo de educación infantil y en Primaria de forma que se pudieran desdoblar las clases en los momentos que fuera necesario y de esa forma poder atender mejor al conjunto del alumnado, especialmente al que tiene mayores dificultades de aprendizaje.

También analizaron los resultados positivos que estaban teniendo el PROA y otros programas de apoyo y refuerzo fuera del horario escolar si se aplicaban desde los primeros años de escolaridad. Decidieron generalizarlo a todos los centros, decidieron lo que todas las familias que tienen medios para ello han hecho con sus hijos toda la vida, cuando les buscan un profesor particular o una academia con el fin de prestarles un mayor apoyo.

También compartieron la necesidad de que se produjera una mayor implicación de las familias, que había que mejorar los canales de comunicación entre familias y profesorado. Compartieron, en definitiva, que como dice el viejo proverbio de la tribu massai “para educar a un niño hace falta toda la tribu”. Con ese fin, incrementaron las competencias del consejo escolar, acordaron fórmulas para incentivar la participación de las familias en las asociaciones de madres y padres de alumnos, así como las actividades de formación dirigidas a favorecer el trabajo en común del profesorado y las familias.

Analizaron también la situación que se estaba produciendo en muchas familias debido a las alarmantes cifras de paro. Familias que no pueden garantizar que sus hijos dispongan de los libros y del material escolar necesario, que no tienen beca de comedor o de transporte. Ante esta situación, acordaron incrementar de forma sustancial las ayudas y las becas para que se cumpliera el principio básico de cualquier país desarrollado “que nadie deje de estudiar, o tenga dificultades añadidas al estudio, por motivos económicos”.

Acordaron también seguir trabajando para alcanzar acuerdos básicos sobre la ESO, la Formación Profesional, el Bachillerato. Se comprometieron a adoptar las medidas necesarias para conseguir que todos los centros públicos y privados concertados escolaricen de forma equilibrada a todo el alumnado con especiales dificultades, con el fin de evitar la creación de centros de diversas categorías. Destacaron la importancia de mejorar la formación inicial y permanente del profesorado, así como el acceso a la función docente a cualquier centro público o privado. De todas esas cosas hablaremos otro día, cuando sigamos soñando.

Trasladaron todas estas iniciativas y acuerdos al parlamento, donde todos los grupos votaron por unanimidad estas propuestas acompañadas de la dotación presupuestaria correspondiente, ya que todos estaban convencidos de que si queremos salir de la actual situación de crisis económica pensando en el futuro es necesario invertir más y mejor en educación.

Había una vez un ministro…. Y había también un príncipe malo, una bruja hermosa y un pirata honrado. Todas estas cosas había una vez cuando yo soñaba un mundo al revés.










1 comentario:

  1. Yo soñaba con un Partido Socialista que apostase por una escuela 100% pública y de calidad en vez de mantener e impulsar una doble red privada-concertada durante sus sucesivos gobiernos, un modelo que hoy más que nunca se demuestra responsable de generar desigualdad, privatización y copago. Entre esto, la ley 15/97 que abrió las puertas a la privatización de la Sanidad y la reforma de la Constitución que ha hecho que ahora los servicios públicos y sociales estén supeditados al pago de la deuda NUNCA JAMÁS EN LA VIDA OS VOLVERÉ A VOTAR. Y SI LO HAGO QUE SE ME CAIGAN LAS DOS MANOS. TRAIDORES.

    ResponderEliminar